Emma Watson, la actriz conocida por su papel como Hermione en las películas de Harry Potter, cuando fue nombrada Embajadora de Buena Voluntad de la ONU, sintió que no merecía el reconocimiento y se preguntaba si sería capaz de cumplir con las expectativas. Y eso que ya había asumido el gran reto con su participación en 8 filmes. Con el tiempo, Emma encontró fuerza en su pasión por la igualdad de género y en el apoyo de quienes creían en ella. En su famoso discurso en la ONU para la campaña hashtagHeForShe, demostró no solo su compromiso, sino también su inteligencia para inspirar a otr@s: https://lnkd.in/dEHp8qb2
El Síndrome del Impostor es un fenómeno psicológico donde las personas dudan de sus potenciales logros y tienen un miedo persistente de ser expuestas como un "fraude". Muchos profesionales llegan, a un nuevo trabajo, justos de conocimiento, o sin experiencia profesional; se han apuntado a uno de esos cursos online de los que tanta oferta tenemos hoy en día, han conseguido la certificación, actualizado su curriculum vitae y superado las preguntas de una entrevista de trabajo. Pero luego llega la realidad, sol@ ante el peligro. ANSIEDAD, FRACASO y en algún caso HUIDA del puesto de trabajo (lo que supondrá rotación para un puesto que seguro que es clave).
La "experiencia" está sobrevalorada; muchos-muchas de los-las profesionales, pueden asumir retos en nuevas tecnologías sin pasar por años de experiencia; los recruiters y empleadores pecamos de "simplistas" [pido perdón si alguien se enfada por la expresión y decide no continuar leyendo]: es verdad que los años de experiencia aseguran la autonomía y el éxito de los resultados, es condición necesaria, pero no suficiente; es más importante un "entorno de apoyo", donde la confianza sea el motor, para que los profesionales puedan sacar lo mejor de sí, aún no contando con experiencia.
Un buen mentor externo a la organización, que no esté directamente implicado en la línea de responsabilidad, asegura la correcta gestión del síndrome del impostor. Proporciona retroalimentación constructiva, resaltando las fortalezas del mentee y sus logros, trabaja la creación de recursos de apoyo, actúa como un modelo a seguir, compartiendo sus propias experiencias y mostrando vulnerabilidad para normalizar los sentimientos de duda. También fomenta un ambiente de apoyo y confianza, donde el mentee se siente seguro para expresar sus inseguridades, trabajando en sesiones individuales y de equipo. Ayuda a establecer metas realistas y alcanzables, guiando al mentee a través de pasos concretos para que gane confianza en sus habilidades, y sobre todo trabajando los valores para un aprendizaje continuado.
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